Para los amantes de las plantas es conocido que el recipiente es uno de los factores importantes a la hora de realizar cualquier trasplante, siendo los más recomendables las macetas o jardineras de barro, ya que éstas son capaces de eliminar el exceso de humedad.
A continuación vamos a enumerar los pasos para realizar el trasplante de nuestro cactus en una maceta de barro con éxito.
- Lo primero de todo será inspeccionar las raíces para comprobar que no tienen ningún tipo de daño o raíces podridas.
- Rellenar el fondo de la maceta con trocitos de madera que impidan el derramamiento de arena por las zonas de drenaje de la misma.
- Seguidamente rellenamos la maceta con sustrato específico para cactus y suculentas.
- Cubrimos la maceta de sustrato, más o menos, hacía la mitad del recipiente, lo suficiente para dejar hueco a nuestro cactus dependiendo del tamaño de la planta.
- Podemos añadir abono de liberación lenta para ayudar al crecimiento de nuestro cactus.
- Por último, colocamos nuestro cactus cubriendo las raíces con el sustrato y con la yema de los dedos hacemos una ligera presión alrededor para la sujeción del cactus.
Consejos a tener en cuenta para trasplantar un cactus:
Hay que recordar que el periodo perfecto para trasplantar un cactus es a finales de invierno principios de la primavera que son los periodos de crecimiento de la planta. Si realizamos el trasplante en épocas de frío, pueden sufrir daños en la raíz y la humedad puede podrir la planta.
Una vez tengamos nuestro cactus trasplantado, no debemos olvidarnos de los cuidados necesarios para su crecimiento, de tal manera, que podamos observar como nuestra planta crece de manera sana y radiante.
Si te ha gustado el post, compártelo en tus redes sociales!
