Si ya era frecuente la duda que invadía a la mayoría de los hogares por estas fechas respecto al árbol de navidad, este año se nos antoja más difícil la decisión. La campaña anti uso de plástico que venimos viviendo en los últimos meses, nos hace reflexionar sobre la contaminación y vertidos que provoca el uso y la fabricación de éstos.
Por otro lado, nos invaden imágenes en la cabeza de montes deforestados, campañas de salvemos los bosques, carteles de no a la tala, etc. Pues bien, ¿Qué hay de cierto en todo esto?¿Qué árbol de navidad debo elegir?
En El Jardín de Atrás vamos a analizar las dos opciones y ver que hay de cierto o falso en las creencias populares acerca de este asunto.
Abeto Natural vs Abeto artificial. Mitos y verdades. Pros y contras.
- Lo primero y fundamental es tener claro que los árboles de navidad suelen ser distintas especies de abetos. Muy importante recordar que PINO no es ABETO.
- No se esquilman bosques de abetos para abastecer la demanda navideña. Los viveros forestales se encargan de la producción, que además, ayuda a la reducción del CO2.
Árbol de Navidad - Son biodegradables al 100%, y ya son muchos los Ayuntamientos que se suman a la recogida de abetos después de navidad para la producción de biomasa.
- Si dispones de un jardín o espacio en casa, puede durar varios años si lo mantenemos en las condiciones adecuadas.
- En favor de los abetos artificiales, diremos que podemos usarlos durante varios años. Sobretodo si vivimos en pisos y no podemos mantener en el exterior el abeto natural.
- Hay distintos precios, pero cierto es que los abetos artificiales, debido a su durabilidad, suelen resultar más económicos. En cuanto a los abetos naturales, existen distintas especies y tamaño por lo que hay distintos precios.
- Los abetos naturales tiran las acículas si la temperatura es muy elevada, pero el ambiente que genera el olor de lo natural es irresistible.
Abeto Navidad
- Si te hemos convencido para adquirir un abeto natural, te dejamos unos consejos de jardinería para su mantenimiento:
- Retirarlo de la calefacción, disponer en una zona luminosa y dependiendo de la temperatura de la casa, regar una o dos veces por semana con un vaso de agua.
- No abusar con las luces, ya que emiten mucho calor. Tener cuidado con los adornos más pesados.
- Una vez pasada la navidad, si quieres deshacerte de él, ponte en contacto con tu Ayuntamiento, que te facilitará la información para que se recicle y sea convertido en compost o incluso reutilizarlo para plantar en parques y jardines. Pregunta también en el punto de venta.
- Si quieres conservarlo:
- Sacarlo al exterior.
- Necesita aire y luz.
- Abonar y añadir sustrato nuevo.
- Bajo ningún concepto plantar en el medio natural, podemos generar un problema en el entorno si no tenemos los conocimientos adecuados. Es mejor emplearlo para jardinería
¿A quién no le gusta tener un pedacito de naturaleza en casa?
Puedes comprar abetos en la Escuela de Ingenieros Forestales.
