La cinta o malamadre es una de las plantas de interior más comunes que nos podemos encontrar en el mundo de las plantas de interior.
Conocida también como araña o lazo de amor, es una planta de origen sudafricano.
Al contrario que plantar rosas en macetas, como vimos en un post anterior, la cinta es una planta con un porte colgante muy fácil de cuidar y, además, muy resistente.
Sus hojas son largas y muy luminosas, con una longitud entre 20-40 cm y entre 5-20 cm de ancho, de color verde con una banda blanca y con flores de color blancas y pequeñas.
Se pueden considerar como plantas de exterior si nos encontramos en una zona de clima cálido, aunque en este caso siempre es mejor tenerla dentro de casa cerca de una ventana.
Su nombre científico es Chlorophytum comosum
La cinta o malamadre es ideal para decorar nuestra casa. Aunque los lugares del hogar que más les gusta son los que concentran humedad, como puede ser el baño, realmente son bellas para cualquier rincón de la casa.
Cuidados de la cinta o malamadre
Ahí van una serie de consejos, que recomendamos desde El Jardín de Atrás, a la hora de cuidar este tipo de plantas:
- Luz. Es una planta que necesita la luz del sol, pero sin exceso, por eso lo mejor es que no reciba la luz del sol directamente, sobre todo en las horas de sol de mayor radiación. Si observamos que nuestra cinta tiene las puntas de sus hojas secas, puede deberse a un exceso por la exposición al sol.
- Riego. La cinta debe regarse una vez por semana si nos encontramos en invierno y dos o tres veces por semana si estamos en la época estival. Al ser una planta que agradece la humedad es muy recomendable pulverizar sus hojas con agua, sobre todo en verano.
- Abono. En primavera y verano, para incrementar su desarrollo debemos abonar la cinta cada quince días. El tipo de abono deberá ser líquido o bien usar un abono orgánico.
Enfermedades de la cinta o malamadre
Como cualquier planta, no estamos exentos de que pueda caer enferma si no le prestamos suficiente atención.
La cinta sufre por las plagas de pulgones, cochinillas o arañas rojas. La manera de evitar estos contagios es tener un insecticida especial para este tipo de plagas y tener vigilada nuestra cinta.
Como hemos comentado antes, cuidado con los golpes de calor, si observamos que las hojas tienen las puntas secas.
Plantar en maceta una cinta o malamadre
Como siempre os decimos, lo ideal para plantar cualquier variedad de plantas es usar macetas de barro, ya que drenan el exceso de humedad.
Dicho esto, la manera más común de plantar una cinta o malamadre es trasplantar sus hijuelos o dividir la mata.
Si nos decidimos por trasplantar hijuelos, el proceso es cortar los hijuelos de la planta y llevarlos a una maceta de barro. O, por el contrario, podemos dividir la mata obteniendo las raíces.
Por último y como dato curioso, las cintas son plantas purificadoras del aire (según un estudio de la NASA) y absorben sustancias contaminantes como puede ser el monóxido de carbono.
Además de ser una planta bella que decora nuestra casa purifica el aire del hogar.
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