Contar con una piscina es toda una suerte para disfrutar del verano. Gracias a la piscina, tus veranos serán menos calurosos, pudiendo disfrutar de un baño refrescante siempre que quieras y lo necesites. Sin embargo, para poder disfrutar de tus piscinas en su completa plenitud, es necesario acondicionarla adecuadamente y dotarlas de las prestaciones necesarias en cuanto a seguridad y confort. Para ello, uno de los aspectos y adecuaciones que debemos llevar a cabo en el acondicionamiento de los alrededores de la piscina.
Bajo nuestro punto de vista, la mejor forma de preparar la zona exterior de nuestra piscina es con césped. Hay usuarios que prefieren pavimentos de distintos tipos, pero esto no siempre es una buena opción por motivo de seguridad. Por ello, en este artículo, queremos hablarte de las opciones de césped que existen para tu piscina y como elegir la mejor.
¿Qué tipos de césped para piscina hay?
Aunque no te lo parezca, la elección del césped para las piscinas es algo importante. En la mayoría de los casos, solemos pasar más tiempo fuera de la piscina, que dentro de ella. Por ello, necesitamos que las características del césped que compremos sean las más adecuadas a nuestras necesidades. Por ello muchos usuarios a la hora de tomar esta decisión se plantean ¿qué es mejor, césped natural o césped artificial?
Pues bien, la respuesta es depende. Depende del uso que le demos, el tiempo que usemos la zona de la piscina y los recursos (económicos y materiales), que le dediquemos a su cuidado y mantenimiento.
El césped artificial, como su nombre indica es sintético y no tiene capacidad de regeneración. Por eso, cuando está deteriorado es necesario renovarlo. Si necesitas comprar, puedes ver precios de césped artificial en Tienda-Piscinas. Obviamente, el césped artificial es menos fresco y se calienta en aquellas zonas en las que les da el sol. Por suerte, los hay de muchos tipos, y los que son para uso frecuente, tienen mejor textura.
Los aspectos positivos del césped artificial son, que no requiere agua para su mantenimiento, no necesitas regarlos. Por lo que esto conlleva un importante ahorro tanto en agua como en abono y aspersores. Además, en los últimos años, el césped artificial ha evolucionado mucho, logrando que se parezca muchísimo al césped natural.
¿Cómo elegir el césped artificial para la piscina?
Antes de comprar el césped artificial, es importante saber que no todos los tipos son aptos para todas las superficies y usos. Por ello, cuando tengamos que elegirlo, debemos tener en cuenta la resistencia al cloro y los productos químicos que usemos en el mantenimiento de nuestra piscina y que podrían dañar nuestro césped artificial si no elegimos el adecuado. También es importante que sea antideslizante, de esta forma, cuando se moje, evitaremos resbalones y accidentes.
Tampoco debemos olvidarnos del drenaje. Este es importante para evitar la generación de charcos en el exterior de la piscina. Aunque el césped artificial no tiene capacidad de regeneración, sus fibras sí tienen capacidad de recuperación, pero esta dependerá de la calidad del césped artificial que hayamos comprado. De esta forma, al retirar la piscina o los muebles de la terraza, sus fibras volverán a su estado inicial.
De la misma forma, tampoco debemos perder de vista, la capacidad ignífuga del césped artificial. Así evitaremos accidentes desagradables en caso de organizar una barbacoa en la zona de la piscina.
El césped natural, si es de calidad, es suave al tacto y de color verde intenso precioso y crece con densidad, fuerza y vigorosidad. Además estos aspectos lo hacen ser resistente a posibles enfermedades. Es esencial tener en cuenta, que no todos los céspedes te servirán para la zona de tu piscina.
Existen unas 10.000 clases de césped natural distintas, todas pertenecientes a la misma familia de las gramíneas. Según el uso que le demos debemos elegir entre un tipo u otro. Los hay para deportes, ornamentales, duros, piscinas…
¿Cómo elegir el césped natural para la piscina?
Para elegirlo, a parte del uso que vayas a darle, que ya tienes claro, debes tener en cuenta aspectos como el clima de la zona en la que vives, el tipo de suelo en el que lo plantarás, el agua disponible para su riego, el drenaje y la sombra que pueda tener en la zona donde lo plantarás. Pero no sólo eso, también necesitarás que la hierba sea higiénica, antideslizante y fresca.
Por otra parte, deberás tener en cuenta, que la zona de los alrededores de la piscina, en la que plantarás el césped contará con un exceso de humedad constante, por las pisadas, y los efectos de los productos químicos y cloro de la piscina. Con todo eso, necesitarás un tipo de césped natural resistente a las pisada, cloro y humedad, pero que además, sea y esté siempre bonito y sea de calidad. Un tipo de césped que agrupa todas estas características es el ray-grass inglés, festuca rubra o el agrostis tenuis entre otros. Por ello, cuando lo compres, lo mejor es elegir una mezcla de todos ellos, junto con la poa pratensis, característica por su poco mantenimiento. Por suerte, hay marcas que comercializan estas mezclas.
Antes de plantarlo, debes tener en cuenta otros aspectos como la cantidad de tierra que necesitas para poder plantar el césped natural, que debe ser una capa de 20cm de tierra arenosa y suelta y sin arcilla. De esta forma, el césped natural se asentará sin problemas. Para mantenerlo, debes saber, que lo adecuado es regarlo todos los días, a primera hora de la mañana o por la noche, con difusores, durante 15 minutos o 25 minutos, si utilizas aspersores. De esta forma, te asegurarás de regarlo sin riesgos de ahogarlo.
Esperamos que con todos estos detalles, puedas escoger el mejor césped para tu piscina, en el que disfrutar al máximo este verano.
